Estos días todo parece menos claro; menos que nunca; mas turbio que jamás.
Una pesadumbre se cierne sobre un “todo” particular. Luce desalentador hacia adelante, equiparable al que más... bueno, no tanto.
¿Que hacer? o, no hacer.
Tal vez si le rezara a la nada, algo haría ¿no?
¿O no hacer nada equivale a rezarle?
Hoy hacer parece reprobable, NO hacer parece más aún, a los ojos de todos los demás.
Eso son síntomas.
Las patadas de Aguirre son síntomas, no consecuencias.
El nuevo viejo PRI es un síntoma.
Darío en Cozumel es un síntoma.
Los linchamientos.
La represión.
La inmediatez.
La desvalorización.
La soberbia.
La deshumanización.
El guitar hero.
El twitter.
La soledad es un Síntoma.
La ciudad late a su pesar. Quiere morir, pero no puede.
¿La humanidad es síntoma? es enfermedad.
La esperanza esta dormida.
El fin es el resultado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario