Varios días sin acceso a la más mínima información de lo que sucede en el país -como si lo que sucediera en la polvorienta carretera de un municipio a ocho horas de la capital de Oaxaca, no ocurriera en y al país; porque la única realidad que entiende esta sociedad es, qué duda cabe, lo que pasa exclusivamente en la esfera política y las redes sociales.
Siguen opinando en menos de 140 caracteres, siguen habiendo debates y los discursos varían un grado más o grado menos hacia nuestra ágil civilización de la barbarie.
México le sigue ganando a selecciones que no son selecciones pero ya no más por 11 goles.
No cambia que Lio haga un hat-trick más; se monte al equipo igual que tantas otras veces y materialice un gol de esos que cuando cierre los ojos, me volverá nítido preciso veloz. Como él.
O sí cambian las cosas, porque ahora lo hizo -lo ha venido haciendo-, con la Argentina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario