Desprofecionalización.

Artículo útil, de Ramón Besa; como siempre que escribe acerca del Barcelona o, de lo que orbite a su alrededor.

Y me dejó imaginando que al rato, Lio (el argentino) destruía a España, el solito. Lo imaginaba como a Noodles en la cubierta, derribando aviones con su metralleta. Me imaginaba que hacía un partido como del Stuttgart en la Champions pasada; o que lograba una calca del día que, él solito, humilló y sepultó en el Camp Nou al otro mejor equipo de Europa, a la orquesta sinfónica de Londres. (Y que le hacía a España un gol como al Getafe, pero más chingón.)

Debe sentirse Lio, como el Charlie Brown del poema de Lizalde: sólo, solitario, en solitud.

Sí, España es el arquetipo de la colectividad y el trabajo; de la humildad si me apuran.

Pero Lio es, lo he visto, el arquetipo del instante, de la vida sin nada que la pueda medir, del presente eterno por fugaz. Lio es el arquetipo de hacer las cosas por el amor de hacerlas.

Me gustaría que eso triunfara, aunque fuera sólo, en un partido de fútbol.